Nikon D5600, pocas novedades para la nueva gama media nipona
Después de un tiempo considerable desde el lanzamiento de la última gama media de DSLR de Nikon –casi dos años–, la Nikon D5500, la firma nipona ha decidido renovar la gama de una manera bastante ligera, o al menos sobre el papel parece una renovación bastante floja, pero habrá que ver cuando se pueda probar si el sensor tiene una renovación en prestaciones, o mantiene la línea continuista que se ha instalado en las DSLR desde hace unos cuantos años.
Podría decir que como usuario de Nikon escribo este artículo de lanzamiento de la Nikon D5600 con un poco de pena, enfado y tristeza, viendo las especificaciones, y repito sin probar el sensor a fondo, parece un poco lo mismo que teníamos de antes, una línea que ya desde la Nikon D5100 es muy similar, que se refinó en diseño con la D5500, y que aunque sea más cómoda que las anteriores, sigue esta Nikon D5600, con una clara pérdida de sensaciones en la visión de sus materiales.
Hablando de datos técnicos, tenemos un sensor en formato DX de 24 megapíxeles, tamaño 23,5 mm x 15,6 mm y una sensibilidad que va desde los 100 ISO hasta los 25.600 ISO, lo mismo que podemos ver desde hace mucho tiempo. Además permite la grabación de vídeo en Full HD a 60 fps —¡adiós 4K hasta el ¿2018?_, o por ahí!–, y los códecs de grabación habituales H.264 y MPEG-4.
En el enfoque tampoco notamos nada nuevo, tenemos 39 puntos de enfoque, con 9 puntos en cruz, que nos aportarán mayor precisión y velocidad, pero parece un sistema muy similar al que teníamos en las versiones anteriores de la misma gama, suponemos una mejora en los temas de seguimiento por el nuevo procesador, y poco más sobre el horizonte.
Donde sí que los fabricantes siguen mostrando interés es en las conecitividades, lo único que parece salvar las «novedades», algunas con Wi-Fi, otra con Bluetooth, y esta nueva Nikon D5600 con las dos, Wi-Fi y Bluetooth 4.1. Contamos con una pantalla táctil de 3,2 pulgadas.
Haciendo un resumen, de lo que tenemos en general, pues pocas novedades, tintes en la conectividad, un diseño similar, un sensor similar –al menos sobre el papel–, con las mismas especificaciones brutas, con la misma calidad de vídeo, y un precio que de primeras, sin confirmar nada, se situará en las grandes superficies a un precio por encima de los 600 euros con los objetivos más baratos, y que se acercará a los 1000 euros con los packs de dos objetivos.