¿Cuándo es el momento ideal para cambiar de smartphone?, ¡resolvemos la duda!
En la tecnología, al igual que en muchas cosas más, todo es cuestión de ciclos. Estos períodos de tiempos definen la vida de los productos, nos dicen cuando hay que dar un giro de timón y buscar otras alternativas, y sobre todo nos siembran la duda sobre cuándo es el mejor momento para renovar nuestro smartphone.
De hecho ahora mismo nos encontramos en pleno inicio de ciclo, un período de renovaciones y nuevos lanzamientos que como todos los años empezó con el CES de Las vegas, continuará con el Mobile World Congress y seguirá con el IFA de Berlin en Septiembre, además, a esto hay que sumarle todos los eventos y keynotes que hagan los fabricantes de forma independiente.
En todos estos eventos y en más o menor medida, se irán presentando los nuevos exponentes de cada fabricantes, smartphones que irán haciendo que los que fueron presentados hace pocos meses atrás, empiecen a notar el paso del tiempo y la obsolescencia.
Cuando se trata de renovar nuestro smartphone, en Android encontraremos que esto es un poco más complicado que en otros sistemas operativos, esto se de debe principalmente a dos razones. Primero, tenemos una gran cantidad de fabricantes que a la vez nos ofrecen una cantidad aún mayor de modelos de smartphones para escoger, diferentes formas de interpretar Android y elementos diferenciadores que nos son vendidos como valor añadido.
En segundo lugar tenemos la elevada cadencia con la cual salen nuevos smartphones Android al mercado, algo que en mi opinión, es la razón principal por la que siempre tenemos la duda acerca de cuándo es el mejor momento para renovar nuestro terminal.
Estos factores hacen que no podamos definir la fórmula exacta y encontrar el momento ideal en el año para cambiar de smartphone. Sin embargo, hay ciertos datos que dependiendo del tipo de usuario que seamos, nuestras necesidades y el tamaño de nuestro bolsillo pudiesen ayudarnos a resolver esta gran duda.
¿Cada cuánto tiempo deberíamos cambiar de smartphone?
Fácilmente esta podría ser la pregunta del millón. Para muchos fabricantes los smartphones son el producto que les da de comer, y como tal tratan de exprimirlo al máximo, esto lo que significa para nosotros es que tengamos un modelo nuevo antes de que podamos terminar de sacarle el máximo partido al que tenemos en nuestras manos.
Esta alta cadencia de lanzamientos hace que encontrar el momento ideal para cambiar de smartphone, o de determinar su vida útil sea una tarea difícil. En este sentido, lo único que tenemos claro en todo este asunto, es que la vida de los teléfonos inteligentes es más corta que el de las tablets y mucho más corta que las laptops.
Aunque cada año salga a la venta un modelo nuevo, esto no quiere decir y por más que nos lo hagan parecer, que nuestro smartphone actual está obsoleto o que no puede competir cara a cara con el modelo más reciente. Obviamente habrán diferencias, algunas de ellas evidentes y otras casi ni las percibiremos, es aquí cuando debemos evaluar lo que tenemos, compararlo con los modelos más nuevos y decidir si vale la pena cambiar o no.
Estas diferencias de las que hablamos se harán más notorias con el paso del tiempo, en los terminales que tienen un año de diferencia entre si estas diferencias posiblemente sean escasas, pero ya con un smartphone de dos o más años de antigüedad, si pudiésemos empezar a notar los puntos a favor de los modelos más recientes.
Estos dos años casualmente coinciden con los períodos de permanencia o de contrato que nos ofrecen la mayoría de las operadoras cuando compramos un móvil nuevo. Si estás contento con tu operadora, no te importa que tu smartphone no sea libre, y te puedes permitir una nueva financiación, una vez vencido tu contrato actual podría ser buen momento para renovar tu teléfono. El único inconveniente de todo esto, es que estaríamos en una especie de deuda infinita con nuestro operador.
Otra de las opciones que tenemos, aunque muy parecida a la anterior, es estar pendiente de las ofertas que anuncian las grandes cadenas comerciales. Estas cadenas muchas veces ofrecen financiación por períodos de hasta dos años sin intereses.
En lo personal esta es una de las opciones más atractivas, puesto que escogiendo el plazo de pago más largo las cuotas quedan relativamente asequibles -dependiendo del precio, claro- y además es un smartphone libre, algo que a la larga resulta bastante conveniente si viajamos a otro país y no queremos pagar el roaming, o simplemente para vender más fácilmente el terminal en un futuro.
Por otro lado, si andamos cortos de presupuestos o no nos podemos permitir una financiación, una opción más que valida es irnos al mercado de smartphones usados. Por unos 300€ - 400€ podríamos encontrar topes de gama de generaciones anteriores en condiciones optimas, smartphones que todavía pueden dar guerra y buenos resultados en cuanto a funcionamiento por algún tiempo más. Esta estrategia de renovación sería para aquellos que actualmente tienen móviles de más de tres años y que quieren renovar, pero no pueden asumir el gasto de comprar uno de los modelos más nuevos.
¿Que dicen los fabricantes el respecto?
Lo que nos dicen es que compremos el último modelo cuantos antes. Muchos caemos en la tentación, aunque es una estrategia arriesgada si no tenemos el timming medido, nadie quiere comprar un smartphone para ser relegado a la obsolescencia tan solo meses después.
En este sentido las continuas oleadas de lanzamiento hacen que esta estrategia de renovación sea algo complicada, sin embargo, históricamente ciertos fabricantes han ido definiendo sus calendarios de presentaciones y lanzamientos, un dato que bien podríamos tener en mente si queremos estar siempre a la orden del día.
El primer cuarto del año le pertenece a Samsung, HTC, LG, Sony y Google. Por lo general esta es la fecha elegida para anunciar los flaghips de estos fabricantes, algo que suele ocurrir en el Mobile World Congress seguido del Google I/O durante el mes de marzo, un evento donde se suelen dar algunas pistas de los planes que tiene Google para su gama Nexus.
El último cuarto del año es el territorio de Motorola, Sony y Google, estos últimos dos no paran. El caso de Google es para materializar todo aquello anunciado durante la primera mitad del año, por lo que veremos los nuevos modelos Nexus aparecer entre Octubre y Noviembre. Sony por su parte acostumbra a lanzar su segundo buque insignia del año en el mes de siempre, algo que coincide de vez en cuando con el IFA de Berlin. En cuanto a Motorola, los últimos años ha planeado sus nuevos lanzamientos durante el mes de Octubre, por lo que si vas tras un smartphone de esta firma, este es tu mes.
Lo que realmente deberíamos considerar cuando queramos renovar nuestro smartphone
Primero que nada debemos evitar caer en el juego de los fabricantes, si no vamos a estar renovando el smartphone cada año o incluso cada semestre si seguimos la política de Sony. En este sentido, es importante que entendamos lo que la obsolescencia significa para nosotros, esto partiendo desde el punto de que la evolución de los teléfonos en comparación con su generación anterior más inmediata, muchas veces no amerita que cambiemos de móvil.
En lo personal no sentiría que mi smartphone está obsoleto si no tiene USB tipo C o carga inalámbrica. Lo que quiero decir con esto, es que quien nos dirá cuando es momento de cambiar de smartphone va a ser el mismo móvil al compararlo con el mercado, y en conjunto con nuestra necesidad de tener lo último que ha salido.
Partiendo de esta idea, hay que analizar el hardware y el software que tenemos para colocarnos en contexto y ver que tan desfasados estamos con respecto a los modelos más nuevos, y estimar si esta diferencia es significativa para nosotros. El resultado de este análisis puede variar de un usuario a otro, habrá quienes sientan la necesidad de cambiar a pantallas 2K inmediatamente porque es la tendencia actual, y habrán otros que con una pantalla HD están más que bien.
Dentro de todo esto, el aspecto más indicativo va a ser el software y sus actualizaciones. El que nuestro smartphone deje de tener soporte oficial a la larga puede resultar un problema, esto principalmente porque ya no recibirá actualizaciones de sistema, parches de seguridad o actualizaciones para mejorar el rendimiento, algo que con el paso del tiempo empezaremos a notar sobre todo si somos usuarios que demanden mucho del terminal.
Finalmente, la respuesta a la pregunta del millón la tenemos nosotros mismos en base al tipo de usuario que seamos y de la capacidad que tengamos de permitirnos algunos caprichos de vez en cuando. En mi caso personal, suelo renovar de smartphone cada año y medio, ¿por qué esta frecuencia?, porque es el tiempo promedio que dura el soporte de los fabricantes, además que pasado este tiempo se empiezan a percibir las diferencias entre generaciones. ¿Y tu, cuál crees que es el momento idea para cambiar de móvil?.
