ASUS ZenFone 3 Max, análisis con vídeo
Es uno de los terminales que hemos probado que más autonomía nos han ofrecido en los últimos tiempos dentro de la nueva gama premium, en especial, dentro de esa aún más nueva gama media premium que quiere costar unos 200 euros para poder encajar en todos los bolsillos. No es un terminal muy habitual, ya que tiene ciertos recortes bastante claros, y por otro lado, tiene puntos en los que seguramente sea el mejor de su gama, curiosa manera de diseñar un terminal, buscando un nicho muy concreto por encima de todo.
Este terminal del que os hablamos es el ASUS ZenFone 3 Max, una grata sorpresa en general por todo lo que nos ha ofrecido y por su capacidad para adaptarse a las necesidades de un usuario de gama media, sin muchos problemas, y de superar las necesidades y expectativas que en él nosotros podíamos depositar.
Diseño
Primer factor importante y punto en el que ASUS no ha recortado, podemos decir sin miedo que no es el mejor diseño del mercado, ni el mejor diseño de la gama, pero la realidad es que el diseño del ASUS ZenFone 3 Max está bien. Tenemos un terminal lo suficientemente bonito como para ser atractivo a la vista y con buenos acabados y materiales. La realidad es que la sorpresa empezó por ahí, unos acabados que están muy bien conseguidos y hacen al terminal muy cómodo.
El uso del metal casi parece obligatorio en todas las gamas de Android que nos encontremos, y poco a poco vemos como terminales con precios que rondan los 200 euros, empiezan a ser realmente interesantes para muchos de los usuarios por un diseño atractivo, el uso del metal y unos acabados en los detalles buenos, los botones, los detalles de las antenas, en general podemos estar satisfechos con un diseño que si lo comparamos directamente con otros modelos de 200 euros, no tiene nada que envidiar.
Hay que reconocer que si nos ponemos a buscar defectos en este ASUS ZenFone 3 Max también los encontramos, no es que sea horrible, pero nos gustaría tener un tamaño algo más compacto, tenemos un terminal de 5,2 pulgadas que puede parecer algo más grande, todos entendemos la razón, alojar esa gran batería, pero sí que nos hubiera gustado tener algo menos la verdad. El grosor sigue un poco esa línea, un poco menos, no hubiera venido nada mal.
Pantalla y sonido
Aquí es donde las especificaciones empiezan a ver el «recorte» de un terminal que quiere ser fundamentalmente económico. Aunque la realidad es que la diferencia entre letra y rendimiento es bastante grande, y el panel nos ha gustado bastante. Tenemos una pantalla de 5,2 pulgadas con resolución HD y una tecnología TFT. Sobre el papel vemos una resolución corta y un tipo de pantalla que parece algo desfasado en el tiempo, y sí nos ponemos a revisar mucho, sí que está por detrás pero en el uso del día a día, te acostumbras con mucha facilidad.
la pantalla al final no se ve tan mal, tenemos un buen nivel de brillo, al final el punto más importante, un buen sensor de luminosidad, una buena respuesta táctil y, aunque la resolución es algo justa y los colores tienen poca intensidad, la pantalla cumple para la gama en la que está este ASUS ZenFone 3 Max y a los usuarios a los que va dirigido.
El sonido en general es correcto, como siempre la posición del mismo no nos gusta tanto, y aquí, aunque vuelve a la parte trasera, una posición que no suele gustar mucho, la realidad es que viendo la experiencia que nos están ofreciendo muchos terminales que tienen el altavoz en el borde inferior, la realidad es que no nos podemos quejar mucho, bastante alto y claro, aunque si tenemos el teléfono con el altavoz pegado a una superficie lisa, no se escuchará mucho.
Cámara
Volvemos un poco a contar lo mismo, el recorte se nota, y la verdad es que este es el primer punto donde tengo que empezar a «azuzar» al software del ASUS ZenFone 3 Max, la aplicación de la cámara es lenta en general y tiene demasiadas cosas que a veces distraen un poco nuestra atención –la notificación de «Activa el Modo nocturno», o lo que diga, sobra por completo–. Tampoco es sencilla de usar, y conseguir una fotografía con un par de detalles a nuestro gusto se hace complicado –es curioso porque en otros modelos de ASUS ZenFone 3 tenemos un modo manual mucho más sencillo–.
Hablando de la calidad, la realidad es que nos ha gustado, hemos visto una cámara que funciona mejor de lo que esperábamos en algunas situaciones, por ejemplo con poca luz entiende bastante bien la escena, y controla más o menos bien el ruido, pero en algunas situaciones tiende a empastar demasiado las fotografías, buscando así una bajada de nitidez que no genere tanto ruido. Lo que menos nos ha gustado ha sido el rango dinámico, el color es aceptable y la velocidad de enfoque, pues no está del todo mal.
Sistema operativo y seguridad
A nivel de seguridad comentar que este ASUS ZenFone 3 Max cuenta con sensor de huellas situado en la parte trasera, que tenemos hasta 5 huellas diferentes y que funciona de una manera correcta, la experiencia que nos ha ofrecido es bastante rápida. Podemos además añadir alguna acción como si de un acceso directo se tratara –especialmente vinculadas a la cámara–.
Por lo demás, tenemos que hablar de un sistema operativo que no nos ha gustado nada, con Android 6.0 Marshmallow y la capa ZenUI 3.0 –lo único bueno es su versión de Android–, la realidad es que la experiencia de este ASUS ZenFone 3 Max es un poco pesada. La personalización del fabricante cuenta con muchas opciones y aplicaciones propias, que a veces se convierten en notificaciones y avisos en las aplicaciones más básicas, teclado incluido, lo que genera una pesadez en algunas acciones. Pensando en un terminal de 200 euros, todos estos extras que alejan al usuario de la experiencia limpia de Android stock, puede ser un grave problema para una adaptación sencilla.
Uso y rendimiento
Quizás el punto que tiene más contrastes dentro de toda la experiencia del ASUS ZenFone 3 Max. Por un lado tenemos una grandísima autonomía ofrecida por una batería de 4.100 mAh, con la que los usuarios menos exigentes conseguirán dos días de uso sin ningún problema. Es sin ninguna duda una de las mejores de su segmento, y una buena sorpresa, terminales con diferentes características, ya que con 200 euros es complicado ofrecer todo.
Sin embargo por el lado del rendimiento tenemos que contar que hemos visto un terminal algo justo, no es que sea malo, pero sí que creemos que podría mejorar un poco su rendimiento general. Es cierto que para las acciones más habituales, redes sociales, aplicaciones y mensajería y navegación web, no hay problema, aunque a veces notamos algo de lag al lanzar las aplicaciones. Si le pedimos algo más al terminal, en especial en el apartado gráfico, pues la verdad es que el hecho de usar la GPU Mali-400, hace que el terminal sufra cuando usamos Google Earth o un sistema de navegación GPS y nos ofrezca una experiencia mejorable en los juegos más exigentes del Google Play.
Conclusiones ASUS ZenFone 3 Max
No es el mejor terminal de la gama media, seguramente no sea el mejor terminal de su gama de precios –esa que ronda los 200 euros–, pero sí que es cierto que si valoramos algunos de sus apartados, podemos estar ante uno de los mejores terminales que podemos encontrar en esta gama media tan competitiva, esa que va desde los 180 euros hasta los 350 euros de algunos modelos. La autonomía y el diseño, son sin ninguna duda sus grandes bazas para enfrentarse a cualquiera.
Por contra, uno de los peores puntos de este ASUS ZenFone 3 Max es su rendimiento, bastante justo y con algo de lag en acciones puntuales y su pantalla, que si bien no es mala, está un poco por detrás de sus rivales en precio. Y lo que yo no he sido capaz de «soportar» ha sido la capa de personalización del fabricante, demasiadas cosas que no sirven, que hasta puede que tengan algo que ver en ese lag de algunas aplicaciones, y que ensucia más que aporta dentro de la experiencia que nos podría proporcionar Android stock, una pena en verdad.