OSVR alternativa «low cost» de Razer a la realidad virtual
Razer, la conocida fabricante orientada al mundo gamer, ha presentado durante el CES 2015 lo último que tiene preparado en cuanto a periféricos. Con OSVR pretende dar un golpe sobre la mesa en el mundo de la realidad virtual, ofreciéndonos un headset que por ahora no destaca demasiado en prestaciones, pero si en precio, ya que se sitúa por debajo de los 200 euros, bastante menos que sus competidores más directos como son Oculus Rift o el cancelado Totem Vrvana.
Este nuevo dispositivo será comercializado como un kit de desarrollo (OSVR -- Open source Virtual Reality), en el que nos vendrá incluido todo lo necesario para poder empezar a funcionar, como son las lentes --que presumen de un índice de distorsión de tan solo el 13%, frente al 20-30% que manejan otros fabricantes--, una pantalla de 5,5 pulgadas y resolución FHD --60 fps y 401 ppi--, sensores que detectan el movimiento de nuestra cabeza y todo el sistema de conectores, carcasa y cintas para sujeción.
Todo este pack es susceptible de ser modificado tanto en hardware como en software, incluso en la web del proyecto nos ofrecen la descarga de todos los planos de desarrollo para que podamos recrearlos mediante impresión 3D, y si tenemos la habilidad suficiente mejorarlos.
Seguramente en cuanto a producto final Razer y su OSVR se encuentren todavía un par de pasos por detrás del que por ahora ocupa el trono de la realidad virtual, Oculus rift. Pero las facilidades que ofrece Razer, tanto económicas como de código abierto, unidas a su experiencia en el sector y que ha sabido rodearse de compañías como Unity, Unreal, Intel, Bosch, Sixense, Gearbox o Leapmotion, pueden dar un gran impulso a su nuevo dispositivo y se ponga a la altura, o quien sabe si por encima, de su principal competidor.
Solo esperamos que esta tecnología siga avanzando y que pronto podamos decir adiós a todos estos kits de desarrollo, pudiendo encontrar en el mercado una dura competencia en el sector de la realidad virtual de la que debería resultar ganador el consumidor.
