Si estás en el mundo de las criptomonedas y tienes algún Bitcoin, te habrás despertado con muchas ganas de vender lo que tienes, y es que el precio de prácticamente todas las monedas digitales, ha estado cayendo en picado durante todo el día.
El valor de todas las criptomonedas está sufriendo una de las caídas más grandes hasta la fecha, muchas han bajando su valor en torno a un 10%, mientras que el Bitcoin, la criptomoneda más importante, se encuentra ahora mismo rozando los 10 mil euros. Recordemos que llegó a alcanzar los 20 mil euros el Diciembre pasado.
Es verdad que todavía se cotiza a un precio bastante caro, pero esto se debe más que nada al boom que sufrió en el último trimestre del 2017, donde llegó a incrementar su valor en 1.300% con respecto al año pasado.
La fuerza que tiene el Bitcoin también la está ayudando a aguantar la embestida de esta súbita bajada de precios, siendo de todas la criptomonedas la que mejor ha sabido manejar la situación.
Algo que no pueden decir Ripple o Ethereum, otra de "las grandes", que han visto como su valor se ha desplomado un 25% y un 15% respectivamente en lo que va de día.
Estas fluctuaciones de precio suelen ser normales cuando de criptomonedas se habla, pero lo que estamos viendo hoy tiene alarmado a todo el mercado.
La caída de los precios en las criptomonedas, viene de la intención que tiene Corea del Sur de imponer leyes que ayuden de algún modo a controlar y restringir el mercado de monedas digitales.
El ministro de Finanzas, Kim Dong-yeon, sugirió que el país podría prohibir totalmente el comercio de las monedas, una medida que parece que está a la espera de ser revisada por el gobierno de ese país.
Por otro lado, gobierno de Corea del Sur ha dicho que estos planes son por ahora teóricos. Sin embargo, esta noticia viene seguida de otra muy similar que se produjo la semana pasada, y que mencionaba que el comercio de criptomonedas sería prohibido totalmente a partir de esta semana.
Estas dos noticias han hecho que las criptomonedas se hayan vuelto más volátiles que nunca, ahora mismo, el panorama es un poco incierto y nadie sabe que va a pasar.
¿Es hora pescar en río revuelto o vender e irse por lo seguro?