Honor 6, análisis

Durante las últimas semanas hemos podido probar el Honor 6. Un terminal de la nueva división de la firma asiática Huawei, con la que pretende ampliar la cuota de mercado fuera de su territorio, apostando por unas altas prestaciones a un bajo coste.

Ya os habíamos puesto los dientes largos con unas primeras impresiones en las que podíamos intuir el gran rendimiento que nos podía ofrecer este Honor 6, y no íbamos desencaminados, así que ahora os traemos un análisis a fondo de lo que ha sido nuestra experiencia del día a día con este smartphone que esconde mucho más de lo que aparenta.

Diseño

Quizás este sea el punto más flojo de los analizados. No es que tenga un mal diseño, al menos no a grandes rasgos. El gran fallo de este punto nos lo encontramos en una grave falta de identidad.

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Al tratarse de una división totalmente nueva quizás cabría esperar por parte de Huawei algo más de innovación, o valentía incluso, a la hora de diseñar la nueva gama de smartphones, pero en lugar de eso nos encontramos con una suma de elementos que parecen haber funcionado a otros fabricantes y que la marca Honor aglutina a modo de collage, resultando una gama de terminales más impersonal de lo que nos gustaría.

Vemos por ejemplo esas esquinas redondeadas, que tantos modelos utilizan, y que, sobre todo en su parte frontal, nos hace recordar a algunos modelos de iPhone. Una parte frontal muy simple completamente en cristal, que solo se ve interrumpida por la cámara frontal, el auricular --perfectamente enrasado para no acumular suciedad— y los sensores, además de por una pantalla de 5” encajada con unos marcos bastante contenidos –sobre todo los laterales—dándonos unas dimensiones de 139,6 x 69,7 x 7,5 milímetros y, uno de los puntos más destacados, tan solo 130 gramos de peso. Convirtiéndolo en un terminal muy cómodo de utilizar y transportar.

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Los márgenes laterales y el superior estarán decorados con una banda plástica en imitación metal que, si bien el resultado es aceptable, habría ganado mucho llevando un material como el aluminio a ese canteado de nuestro Honor 6.
En el lateral derecho nos encontraremos los únicos botones físicos con los que cuenta el terminal, como son el de encendido/desbloqueo y el de subir/bajar volumen y también la tapa que alberga la Micro SIM y la tarjeta Micro SD, ya que, al tratarse de un terminal unibody, no podremos retirar la tapa trasera. En el margen superior destacamos la entrada minijack de audio, el micro de cancelación de ruido y el puerto de infrarrojos –podremos utilizarlo como un mando a distancia--, mientras que el lateral izquierdo estará totalmente libre –algo muy cómodo a la hora de utilizar el terminal en horizontal--.

La parte inferior, libre de esta franja metalizada, es en mi opinión la que le da un toque más elegante al diseño, encontrando la combinación perfecta entre la curvatura y el brillo que nos ofrece el blanco perlado del modelo que tenemos a prueba. En este margen nos encontramos el micrófono y la entrada de Mini USB.

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Si la parte delantera nos recuerda mucho a terminales de Apple, con la trasera nos vienen a la mente los diseños de Sony –que ya utilizaron también otras marcas, como Wiko--. A pesar de que el acabado puede parecer cristal nos alegramos de que se trate de plástico, ya tenemos suficiente cristal con el que preocuparnos de las caídas.

Aquí nos encontramos con la cámara trasera, bordeada por un aro metálico y perfectamente integrada en el cuerpo del terminal, acompañada del doble flash led --con el mismo acabado--, y el altavoz, que lo encontraremos en la parte inferior –nos gustaría haberlo visto en la parte delantera— sin ningún tipo de resalte que evite su obturación al dejarlo sobre una superficie lisa.

También en acabado metálico podremos leer las letras de esta nueva división Honor, compartiendo plano con una fina trama reticulada que da el toque de acabado a la parte trasera.

Pantalla y Multimedia

Si tenemos en cuenta el precio por el que podemos adquirir el terminal, y la gama en la que se mueve, poco más le podemos pedir a esta pantalla. Un panel LCD IPS de 5” que nos ofrece una densidad de píxeles de 441 puntos por pulgada y una resolución Full HD, más que suficiente para un terminal de este tamaño y que agradecemos a la hora de analizar la autonomía.

Los ángulos de visión y los niveles de brillo son más que correctos, quizás la única pega que le encontramos es en el tratamiento del color, que tiende a colores demasiado frios, pero como no todos vemos igual, el Honor 6 incluye una herramienta con la que podemos calibrar la temperatura de color de la pantalla, lo que ayuda a elegir la configuración que más agradable nos resulte.

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La pantalla cuenta además con la conocida capa protectora de cristal Gorilla Glass 3, de calidad ya contrastada en un buen número de terminales, y que ayudará a protegerla de golpes y arañazos.

El punto flojo en el apartado multimedia lo encontramos en el sonido. Con un altavoz trasero, del que ya os hablamos que no nos gusta su ubicación, y que ya de por si merma la calidad justa que posee. Seguramente llevando este altavoz a la parte delantera ganaría tanto en calidad de sonido como en diseño.

Sistema operativo y Rendimiento

Ya os hemos hablado del software que mueve este honor 6, y es que recientemente ha sido actualizado a EMUI 3.0, la última versión que Huawei imprime sobre una base que es Android 4.4 KitKat.

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Como hemos visto se trata de una capa de personalización altamente intrusiva, que modifica prácticamente todos los rincones de nuestro interfaz, aportando cosas interesantes como el interfaz simple o el número de opciones de personalización, pero que se aleja demasiado de la experiencia Android Stock que muchos demandan, incluso con la desapareción del box de aplicaciones tan característico del Androide verde.

Aun así la navegación será fluida y como ya hemos dicho podría servir de paso intermedio entre los sistemas operativos de Android y Apple, debido a que toma cosas de ambos.

El corazón que hace bombear este Honor 6 es un HiSilicon Kirin 920 fabricado por la propia Huawei, con procesador de ocho núcleos: cuatro Cortex-A15 y otros cuatro Cortex-A7 de menor consumo, ofreciendo un rendimiento muy satisfactorio. Algunos benchmark lo sitúan a la altura de otros terminales como el Galaxy 5, aunque ya sabemos que no nos debemos fiar 100% de estas herramientas, y preferimos quedarnos con las sensaciones que nos ofrece el terminal, que también son positivas.

Las aplicaciones del día a día se moverán perfectamente, incluso las más exigentes, pero en donde sí que podemos acusar algunas pequeñas ralentizaciones es en los juegos más potentes, y es que, a pesar de que el procesador cumple sobradamente, la GPU integrada, una Mali T628MP4, se encuentra un par de peldaños por debajo de los chips de Qualcomm. Es normal, y seguramente sea menor esta diferencia de niveles que la diferencia de precio que existe entre unos y otros.

A todo esto debemos sumar los 3 GB de RAM con los que cuenta el Honor 6 que sin duda pondrán ese granito de arena extra para dejar muy alto el listón del rendimiento entre sus compañeros de gama.

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La autonomía suele ser uno de los puntos más controvertidos de los smartphones contemporáneos, y es que muchas veces podemos darnos con un canto en los dientes si llegamos con comodidad al final del día.En esta ocasión nos llevamos una grata sorpresa, y es que, haciendo uso de los 3 planes de energía con los que cuenta el dispositivo, hemos logrado alcanzar los dos días con un uso “habitual” de nuestro terminal. Sin duda el bajo consumo del procesador de Huawei, unido a una resolución y un tamaño más contenido de la pantalla, y la inclusión de una batería de 3.100 mAh de polímero de litio –todo un logro en tan solo 7,5 milímetros de grosor— son una buena combinación para asegurar una autonomía por encima de la media.

Algunos usuarios se quejan de tiempos de carga demasiado largos. Es cierto que la carga ultrarrápida que vemos en otros terminales, como el Nexus 6, aquí no se da, pero nosotros hemos registrado una carga completa en tiempos alrededor de una hora y media, lo cual no nos parece exagerado después de aguantar dos jornadas sin carga.

En cuanto a memoria interna nos encontraremos con dos versiones diferentes, 16 y 32 GB, ambos ampliables mediante tarjetas microSD.

Para acabar con el apartado de rendimiento nos falta hablar de la conectividad, y aquí tenemos otro punto que cumple sobradamente. Contaremos con Radio FM, NFC, LTE, Bluetooth 4.0 y puerto de infrarrojos. Un apartado muy completo y que quizás lo único que le pueda faltar sea la carga inalámbrica.

Cámara

Huawei está poniendo mucho énfasis en su apartado fotográfico. Ya en su gama Ascend podíamos ver su gusto por montar cámaras de gran calidad, sobre todo apostando por una cámara frontal que marque las diferencias para los famosos selfie que tanto gustan a algunos.

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En esta ocasión tampoco se queda atrás, cámara trasera de 13 megapíxeles, con sensor IMX214 de Sony y apertura f/2.0. Mientras que la delantera contará con 5 megapíxeles y una apertura de f/2.4. –88º de gran angular para que entremos todos en ese selfie de turno--.

Con la luz adecuada, ambas cámaras se comportan de forma excelente, pero cuando las condiciones de luz no son las idóneas vemos alguna pequeña carencia. Si estamos expuestos a una luz muy fuerte, o a grandes contrastes que exijan un gran rango dinámico de la cámara los colores tienden a perderse hacia tonos pálidos, nada demasiado grave, pero sí que notamos esta pequeña pega en alguna de las capturas que os mostramos.

Como a cualquier Smartphone, cuando el nivel de luz es bajo, el ruido se hace evidente, pero en esta ocasión nos encontramos unas capturas que superan a las de sus compañeros de gama. No estamos a niveles de los Lumia en cuanto a fotos nocturnas, pero nos sacará de algún apuro con suficiencia.

En cuanto al software de serie que trae para la cámara decir que es completo y de uso sencillo. Tendrá las típicas funciones de panorámica, modo HDR, modo belleza o ráfaga, y en la cámara frontal disponemos de un modo espejo con diferentes opciones.

Tanto la aplicación como la cámara destacan por su velocidad, de captura y de enfoque, y tiene el añadido de poder seleccionar dos puntos diferentes para el enfoque y la medición de la luz, lo que nos dará más juego a la hora de suavizar algunos contrastes demasiado bruscos.

Conclusiones

Con todos los puntos ya analizados, llegamos al punto en el que tenemos que decidir si este es el terminal que más se adapta a nuestras necesidades.

Seguramente el Honor 6 no tiene el diseño más atractivo del mercado, un poco más de personalidad, o de distinción, sobre todo en la parte delantera no le vendría nada mal. Y es cierto que, a pesar de que EMUI 3.0 ha evolucionado mucho y bien, todavía le falta pulir un par de cosillas a este sistema operativo de Huawei para llegar a la gran mayoría de usuarios.

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En cambio tenemos un dispositivo que rinde a un nivel muy alto, sobre todo si lo comparamos en la gama de precio en la que se mueve, con una autonomía por encima de la media, una buena cámara y un apartado de conectividad muy completo.

¿Estaríais dispuestos a sacrificar ese puntito de exclusividad y diseño, a cambio de todas las bondades que nos ofrece este Honor 6? Yo creo que merece la pena.

Tito Toscano
Tito Toscano

Eterno estudiante de arquitectura en la ETSAC.
Paisajista/diseñador en mis ratos libres.
Blogger de profesión.
Aficionado a todo tipo de deportes, videojuegos, cine, series,... y a todo lo relacionado con el modelismo.

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